El crudo de la OPEP se abarata un 3,8% en una semana ante la reunión del cartel

La tendencia bajista de los precios del petróleo era corroborada por la ligera caída de los precios de los futuros de esta materia prima en el mercado de Nueva York (Nymex) al descender su cotización, mientras el oro se acercaba a la cota psicológica de los 1.000 dólares por onza.
La incertidumbre reinante sobre las nuevas regulaciones del mercado energético en EEUU y una recuperación económica mundial más lenta de lo previsto pueden haber inducido a los inversores a refugiarse en el oro en lugar de dedicarse al «oro negro», según la consultora vienesa JBC.
EEUU está estudiando cambios significativos sobre la regulación, el comercio y la información de los mercados de petróleo y gas, lo que tendrá, con seguridad, repercusiones en sus transacciones.
En cualquier caso, los ministros de los 13 países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se encontrarán la semana próxima en Viena una situación macroeconómica mundial con escasos incentivos hacia un mayor consumo de petróleo, salvo la proximidad del invierno en el hemisferio norte.
Uno de los argumentos que propician una leve caída de los precios de la variedad WTI, de referencia en EEEUU, que ayer cerró a 68,02 dólares en Nueva York, es que los inventarios de crudo en la primera economía mundial no bajaron tanto como se esperaba.
De hecho, las reservas norteamericanas de petróleo bajaron 400.000 barriles la pasada semana, frente a una caída de más de un millón de barriles que se esperaba y el total, de 343,4 millones, es un 13,9% superior a lo almacenado hace un año.
En Viena está previsto que en la conferencia de la OPEP se pida una mayor disciplina a los miembros de este cartel, que en el presente solo cumplen el 71 por ciento de la reducción de la cuota de producción acordada de 4,2 millones de barriles diarios.
Así pues, las miradas de los mercados estarán puestas en las declaraciones de esta organización al término de la reunión de un día en la capital austríaca.
Un aliciente para la recuperación de los precios sería una caída de los inventarios de petróleo, pero los intereses de la OPEP chocan, por ejemplo, con la estrategia de Rusia, que en agosto alcanzó una nueva cota mensual de producción de 9,97 millones de barriles diarios gracias a la explotación de nuevos yacimientos en Siberia.
Además, la petrolera BP anunció el descubrimiento de un yacimiento gigante en el Golfo de México, en aguas estadounidenses, y aunque se desconoce por el momento su volumen exacto, parece ser mayor que el encontrado por la misma compañía en el campo de Kaskida en 2006, con unos 3.000 millones de barriles de crudo.
El yacimiento se situó a casi 1.300 metros bajo el agua con una profundidad total de 10.700 metros, que supondrá la mayor exploración petrolífera jamás realizada en la industria, dijo la consultora JBC.
Sin embargo, habrá que superar, en primer lugar, considerables obstáculos técnicos, con lo que no se espera que comience la producción antes de la segunda mitad de la próxima década.