Alguien ha matado a alguien

Parece que ni diplomacia silente, ni Administración silente, ni Operador de Transporte y Sistema Silente. A las trincheras. A los medios. De las investigaciones de los órganos reguladores, a los disparates, simulacros de apagones y apagones.

Inconscientes. Los españoles según Víctor Pérez Díaz no conocen el precio de la energía, ni del agua. Ni falta que les hace, con estas tarifas. Tampoco se sabe cuál es la liquidación final de la tarifa eléctrica de 2006, un año más tarde en una situación insólita (es un adjetivo, suave y eufemístico). Quiere decirse, que en el sector eléctrico, el hecho de que no se sepan las cuentas las cuentas no es sólo patrimonio de los consumidores, tampoco lo saben las empresas, y no se sabe en la Administración. Y otra cosa es como se presentan. En definitiva, que todos somos todos inconscientes con el precio y los costes de la energía. Por otra parte, podemos afirmar que tampoco lo sabrán los consumidores del futuro. Pues, en el hipotético caso en el que se produzca la equiparación con los costes reales en algún momento de nuestra unidad de destino en lo universal, éstos tendrán que pagar la herencia de sus antepasados en términos de déficit tarifario. En definitiva, que nadie sabrá el coste de la energía, ni hoy ni mañana. Es mejor vivir así, que soportar la dura realidad.

Alguien ha matado a alguien. La presidenta de la Comisión Nacional de Energía, amagó con un expediente sancionador a una petrolera la semana que estamos. Lo hizo en TV3 y no quiso dar nombres, prolongando la intriga. Al parecer esto ha sorprendido y ayer se formulaban quinielas. En los mentideros todos se preguntaban y trasladaban la mirada los unos a los otros para poder responder al acertijo. Recordemos aquel famoso ‘gag’ de Gila, que consistía en la detención del peligroso criminal Jack el Destripador mediante el procedimiento de las ‘indirectas’: Gila le inquiría al famoso criminal británico “¿Alguien ha matado a alguien?”, hasta que sucumbió ante tanta presión y confesó. Y mientras, en todo este follón, parece que la Comisión de Defensa de la Competencia también está poniendo sus investigaciones sobre el sector de las petroleras por la distribución minorista, a partir de un informe de la propia CNE sobre una investigación realizada en Vigo y Jérez de la Frontera. ¿Sabremos quien es la compañía señalada por el dedo acusador? ¿Sabremos quien llega antes a la denuncia, si la CNE o la CNC? ¿Es ‘consciente’ la presidenta designada políticamente de un órgano regulador independiente y colegiado a la hora de proferir un vaticinio semejante en la televisión directamente? En todo caso, este presumible juicio sumarísimo, de existir, no es una actuación silente.

Red Eléctrica hace un simulacro de apagón con REN y le sale bien. Si, porque los apagones, como el de Barcelona, le salen mal. No sabemos si el simulacro incluía el incendio de una central de distribución colocada ‘en rosario’ con 350.000 usuarios conectados a la misma. O eso son los ‘pequeños detalles’ y los cuellos de botella de la red. Por que si no, podríamos hacer un ‘apagón’ en condiciones perfectas: sin incendios, que no sea en una ciudad, y sin azúcar añadido, como los zumos. Algo muy parecido a lo que es la tarifa ajustada a la inflación ¡prevista!, algo inconsciente. La diferencia entre un apagón real y el que se hace en campaña de imagen, que se pueden incluir efectos especiales y ¡prensa!.

Red Eléctrica en campaña con entrevistas presidenciales. Aún resuenan los ecos de los titulares de la entrevista en Cinco Días a Luis Atienza, en un ejercicio de defensa sobre las responsabilidades del apagón de Barcelona y de sus consecuencias incendiarias, incluso en el plano regulatorio. El formato de entrevistas presidenciales fue instaurado y muy criticado hace años cuando la periodista Victoria Prego realizaba entrevistas en un medio oficial (TVE) que se tachaban de acomodaticias, al entonces Presidente del Gobierno Felipe González. El formato, en este caso, no es original y parece que todo el mundo en el sector se ha dado cuenta y, hasta con sonrisas malévolas, parece que reproduce los papeles de aquel entonces, tanto para el entrevistado, como para la entrevistadora. Una entrevista claramente defensiva, obvia, con preguntas que incluso trasladan un cierto victimismo hacia Red Eléctrica de España y su presidente, con titulares dirigidos a las críticas de los últimos meses, al informe de la CNE y de la Generalitat sobre el apagón de Barcelona y para reclamar la vigencia del TSO (a lo REE) y la ‘necesaria coordinación’ con Enagás, incluso en la defensa de los incrementos de retribución que prepara Industria para Red Eléctrica. También abre un curioso capítulo para incurrir en una comparación con Enagás y su modelo de separación del TSO y defenderse de su inacción. No habla sobre los blindajes y los salarios.

Wilde, el precio y el valor. Wilde afirmaba que un cínico es el que conoce el precio de todas las cosas, pero desconoce el valor de las mismas. Hagamos parejas: el precio de la energía, el valor político de los consumidores en precampaña electoral. La realidad de lo que ocurre en los apagones, con respecto a los simulacros programados y televisados. La realidad de las redes de transporte y de crecimiento de las mismas en los últimos años, con respecto a las necesidades derivadas del mayor consumo y el crecimiento en generación. El papel necesario de un operador de sistema independiente y la perversión del comportamiento como operador del sistema y regulador virtual (incluyendo el condicionamiento de la regulación, del mercado y contra las empresas, sólo hay que ver el pedestal – y la soledad- desde el que se realiza y formulan las respuestas y las preguntas de la entrevista). La crítica a los medios de comunicación por la difusión de las responsabilidades del apagón frente a la utilización de los mismos en campañas de propaganda. Las coberturas mediáticas para justificar una eventual operación Red Eléctrica-Enagás, tanto tiempo en la agenda oculta y las realidad de las sinergias posibles.

Todo el mundo tiene su campaña abierta, desde Red Eléctrica a la propia Maite Costa. Todo el mundo pide y necesita un grado de inconsciencia para seguir, hasta los consumidores, su recibo y el que define como se elabora.