Todas las trampas de la tarifa eléctrica – 1

Los Consejeros de la CNE tienen que analizar con mucha urgencia los temas que tienen entre manos, y ello a pesar de la tremenda sobrecarga que tiene encima actualmente. Eso es, al menos, lo que opina Javier Peón. Acompañando a esta afirmación, Peón no se anda con rodeos y acusa al Gobierno de Zapatero de abusar del procedimiento de urgencia para la emisión de los informes preceptivos de la CNE. Una circunstancia que obliga al equipo a emitir dictámenes a medias y cuyas consecuencias se resumen en insuficiencias y lagunas. Peón considera que las reformas normativas que trata la CNE con vistas a emitir un dictamen deberían ser fruto de un debate más profundo y participativo por parte de todos los agentes y administraciones involucradas.
Ya está en poder de todos el conocimiento de que el Ejecutivo ha dicho que en enero se elevará la tarifa eléctrica un 2,8%, en línea con el IPC. Eso es una verdad a medias. El IPC podrá subir un 2,8% -o eso se prevé- a lo largo de todo el año 2007. Pero el incremento del 2,8% de la tarifa eléctrica sólo corresponde al primer trimestre. El incremento de la tarifa se revisará trimestralmente, así que puede alcanzar, perfectamente, el 10% que el Gobierno no se ha atrevido a subir de un golpe -por necesario que sea- por lo impopular de la medida.
Ésa es una de las trampas. Acabar con el déficit de tarifa, que es la diferencia entre lo que las eléctricas ingresan vía recibo de la luz y lo que les cuesta producir la energía que nos proporcionan, requiere un incremento considerable del importe de la factura. Un incremento porque el petróleo y el gas se encarecen, y por tanto el coste de producción de electricidad tiene que encarecerse al mismo ritmo. No así lo ha hecho la factura eléctrica desde hace tiempo, porque los Gobiernos no se atreven a enfrentarse al electorado. Por ello limitan la subida de la luz. Eso no significa que no paguemos o no vayamos a pagar el déficit.
Pero volviendo a las conclusiones del consejero Peón encontramos que la propuesta del Ejecutivo para actualizar las tarifas «modifica de forma parcial e inconexa aspectos esenciales del modelo regulatorio, pero no permite una definición acabada de cuál ha de ser el nuevo modelo aplicable». En opinión de Peón, el Gobierno no justifica adecuadamente la subida de tarifas, «ni en sus cuantías ni en el reparto de las mismas entre los distintos tipos de consumidores.»
El consejero hace otra observación. Entre las modificaciones que se introducen al modelo regulatorio critica especialmente aquélla que prohibe permanentemente la vuelta a tarifa a ciertos tipos de consumidores en caso de que opten por el mercado liberalizado. Y lo explica porque esta medida produciría el efecto contrario, incentivaría que los consumidores permanezcan en la tarifa.
Sin embargo, de todas las modificaciones estructurales, la que Javier Peón considera más grave es la que se refiere al reconocimiento del déficit «ex ante» (de antemano) para la tarifa 2007. Según explica, esto tiene un efecto perverso que golpea de lleno el funcionamiento eficiente del sistema eléctrico español. Peón defiende que la desviación de la tarifa eléctrica real con respecto al coste de generación energética se calcule a posteriori, con los datos en la mano, ya que cualquier previsión que se haga no se acercará a la realidad puesto que se desconoce cuál será el escenario final del sistema eléctrico español.
Puede acceder al voto particular de Javier Peón en el documento anexo o haciendo clic aquí.