El crudo terminó a más de 50 dólares, sin tiempo para reaccionar ante el reajuste a la baja de la AIE
Los precios del petróleo han cerrado una semana más por encima de los 50 dólares el barril, aún sin tiempo para reaccionar ante el nuevo y severo reajuste a la baja de las previsiones sobre el consumo mundial de crudo publicado el viernes por la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Debido al festivo del Viernes Santo estuvieron cerrados los mercados de futuros de Londres y Nueva York, donde se comercian los contratos del Petróleo Intermedio de Texas (WTI), la referencia para América, y del crudo del Mar del Norte Brent, referente en Europa.
Por eso, sus precios no reflejan aún los nuevos y pesimistas cálculos de la AIE, según los cuales la demanda mundial de petróleo mediará este año unos 83,4 millones de barriles diarios (mbd), lo que supone una caída anual de 2,4 mbd.
Las nuevas cifras implican una fuerte corrección a la baja, de 760.000 barriles, de las estimaciones publicadas tan sólo hace un mes, y se encadenan a las revisiones bajistas que la agencia encargada de velar por los intereses energéticos de los países industrializados viene efectuando desde que se desató la crisis financiera en agosto de 2008.
Sin conocer aún esas nuevas perspectivas que deberían presionar a la baja sobre el «oro negro«, los mercados petroleros terminaron la semana claramente optimistas, en consonancia con las principales bolsas internacionales y sostenidos por un incremento de las inventarios de crudo en Estados Unidos menor del que se esperaba.
El barril del Brent para entrega en mayo se situó en los 54,06 dólares al concluir la sesión del jueves en el Intercontinental Exchange Futures (ICE) de Londres, subiendo un 4,7% respecto al valor del cierre de la jornada anterior, mientras que el WTI avanzó un 5,79%, hasta los 52,24 dólares, en la Bolsa de Nueva York.
En la perspectiva semanal ambos tipos de crudo mantuvieron estable el nivel de su cotización, variando sólo ligeramente: el Brent subió en un 1,1% y el WTI retrocedió en un 0,5%.
Mientras, la canasta de doce calidades de crudo que utiliza como barril referencial la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se sitúa en los 50,25 dólares, aún lejos del piso de 70-75 dólares que el grupo desea obtener para poder invertir en necesarios proyectos petrolíferos.
No obstante, el valor del barril ha recuperado algo de lo perdido desde diciembre pasado gracias a los severos recortes de la producción, por un total de 4,2 mbd, acordados por la organización para frenar el desplome de los precios.
Desde el récord de más de 140 dólares/barril alcanzado en julio del año pasado, la «canasta-OPEP» se precipitó a menos de 35 dólares en diciembre, mes que terminó con un promedio de 38,60 dólares, mientras que en todo el año 2008 su media fue de 94,45 dólares.
Según el informe de la AIE, la OPEP ha continuado cerrando sus espitas en marzo, cuando sus suministros sumaron 27,8 millones de barriles al día, 235.000 barriles diarios menos que en febrero. Pero las cifras de la agencia revelan que la reducción de la oferta de la OPEP no ha logrado frenar la construcción de los inventarios comerciales de crudo en los países industrializados.
Esas existencias en las naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) subieron en febrero en 7,5 millones de barriles, hasta los 2.743 millones de barriles, y se sitúan un 7,2% por encima del nivel que tenían hace un año. Con ello, alcanzan para cubrir 61,6 días de consumo, mientras que la OPEP aspira a que su nivel se sitúe en los 52-53 días.
La organización petrolera publicará el miércoles próximo sus propios cálculos sobre la demanda petrolera y tiene previsto celebrar una conferencia extraordinaria el 28 de mayo en Viena para reajustar eventualmente el nivel de su oferta conjunta de crudo.


